Oración por los Enfermos

Padre Celestial que te encuentras en los cielos, Dios todopoderoso, a tí sea toda la honra, la gloria, el poder y la alabanza. Padre Santo, te pedimos tengas misericordia de tus hijos enfermos, personas grandes, ancianos, adultos, jóvenes, niños. Padre, sabemos que es una época complicada, sabemos que lo que sucede en el mundo está bajo tu control. Señor, te suplicamos humildemente, sana a los enfermos, ya sea de la enfermedad COVID o de cualquier otra enfermedad, incluso sana a las personas que hayan sufrido accidentes, porque una fractura o golpe, también requiere sanidad.
Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Mat. 9:12 RV1960
Ten misericordia de nosotros Dios santo, tú eres nuestro sanador; pedimos humildemente que sanes a los enfermos Dios, solo tú puedes hacerlo, sólo tú tienes el poder, pero también entendemos que si alguien no sana, es porque así ha sido tu voluntad, porque seguramente estás tratando con las personas en cuestión. Aún así pedimos por esas personas, que las fortalezcas en esos momentos de angustia.

Pedimos que les des entendimiento, que su corazón pueda oír los planes que tienes con ellos y, pedimos que su sufrimiento sea disminuido, que su sufrimiento sea leve, que puedan soportarlo y que de ser posible puedas sanarlos.
Y saliendo Jesús, vio una gran multitud, y tuvo compasión de ellos, y sanó a los que de ellos estaban enfermos. Mat. 14:14 RV1960
Toca sus corazones y ayuda a sus familiares a permanecer unidos y a estar confortados, porque sabemos que sus familiares también sufren debido a la enfermedad de su paciente, pedimos misericordia también para ellos. Pedimos que suplas las necesidades de estas familias que tienen algún enfermo de gravedad, porque los gastos familiares son pesados cuando se tiene algún familiar en el hospital o postrado en casa.
Pedimos pues la sanidad física de los enfermos, pero también pedimos por la salud de sus corazones, por la salud de sus mentes, porque la experiencia que estén viviendo los haga más humanos, mas sensibles. Porque sus conciencias no caigan en maldad y malos deseos hacia sus prójimos, es decir, porque su mente no se vuelva entenebrecida, sino más bien tengan salud mental y conciencia del Dios todopoderoso.
Te pedimos todo esto en el nombre de tu amado hijo Jesucristo.
Amén